Hablar y esperanza de vida.
No sé nada en el mundo que tenga tanto poder como una palabra.
Emili Dickinson, 1861

«Yo quiero proponerle a usted un abrazo, uno fuerte, duradero, hasta que todo nos duela.
Al final será mejor que me duela el cuerpo por quererle, y no que me duela el alma por extrañarle.»
Julio Cortázar

Darwin: ¿Y qué es para ti estar contento?
Niño de 4 años: Reirme, hablar y dar besos.
Charles Darwin, 1872

